Panza llena, corazón contento
La tercera edición de la Feria Masticar fue realmente un éxito. Del 16 al 19 de Octubre en el predio de Colegiales, El Dorrego, una multitud tuvo la oportunidad de recorrer más de 40 puestos atendidos por sus chefs, de conocer el mercado compuesto por productores de todo el país, de recorrer los túneles de vino y degustar copas de las mejores bodegas.
Quizás algunos todavía se preguntan qué es la Feria Masticar, por eso, repasemos: la Feria Masticar está organizada por A.C.E.L.G.A., la asociación de cocineros y empresarios ligados a la gastronomía argentina. El objetivo de A.C.E.L.G.A es promover una alimentación equilibrada y, a su vez, seguir construyendo la idea de cocina argentina, que según su visión tiene un gran potencial. Es decir, en Argentina se cuenta con una gran variedad de productos de buena calidad pero que son poco conocidos y a veces inaccesibles.
En ese punto, atención emprendedores: A.C.E.L.G.A. confió en la fuerza de las iniciativas colectivas y por esa razón nació la Feria Masticar, la única feria de cocina argentina organizada y atendida por cocineros que cumplió el deseo de dar a conocer productos regionales como quesos, fiambres, hongos, aceites, huevos, frutas, mieles y lácteos y de ser accesible a una gran cantidad de personas que asistieron a esta fiesta del paladar bajo el lema “comer rico hace bien”.
En el año 2012 asistieron 50 mil personas, en el 2013, 78 mil, este año más de 100 mil. De hecho, transitar por el predio no resultó del todo confortable. “Me sorprendió la alta concurrencia por ser un día hábil, fue una sorpresa... nos quedamos sin platos media hora antes que termine el evento” dijo un integrante del stand del restaurant Tegui el día de la inauguración.
La entrada tuvo un valor de $50 y para consumir dentro de la feria se debían adquirir los “Billetes Masticar” que, al estilo el juego El Estanciero, permitían la compra de los productos del mercado y los platos de los puestos.
Para tener una idea de los precios: una copa de vino, entre $30 y $40. Un tostado francés de jamón y queso, cubierto con salsa blanca y queso gratinado del cocinero francés Christophe, a $60. En Julep, de la mano de la barwomen Inés de los Santos, por $50 se disfrutaba el trago Mimosas de Saúco: espumante Extra Brut, almíbar de saúco y menta fresca. Un bocado dulce en la Compañía de chocolates, $45. Un choripán de La Cabrera a $35, y lo servían en un colectivo de la línea 17 que funcionaba como parilla en el patio del predio al aire libre.
La Feria Masticar cuenta con el respaldo del Gobierno de la Ciudad por eso sumaron “estaciones saludables” que incentivaban los valores como “cocinar casero, compartir la mesa, volver a comer frutas, verduras y volver a tomar agua.” Uno de los juegos de las estaciones consistía en correr por 30 segundos en una máquina que al cumplir el objetivo ofrecía como recompensa una manzana verde.
En el auditorio se realizó una jornada de coctelería en la cual participó Sebastián García, mejor bartender de Argentina en 2012 y 2013, que junto a colegas dieron cátedra de tragos e infusiones. Fernando Trocca, cocinero y empresario argentino, expuso en la charla de Carnes Argentinas, entre otras charlas de Gastronomía y Negocios.
“La edad importa sólo si eres un vino o un queso”, lee en voz alta Victoria Giri, vecina de la Ciudad de Buenos Aires, en un cartel entre los productos del mercado, y manifiesta con entusiasmo estar a la espera del nuevo encuentro “para masticar" en el 2015.
De yapa, te dejamos el audio con el informe de la visita a la Feria Masticar en el programa radial "Hay Cosas Peores":
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